PURA ENVIDIA

La envidia es como esas barritas de incienso que una vez que se les prende la punta ya no se detienen hasta consumirse por entero; y, al igual que ellas, se basta y se sobra para apestar toda una casa, toda una vida, toda una raza.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

CLOSE
CLOSE